Blasphemous

El nuevo título de The Game Kitchen, mezcla elementos de Dark Souls con algo de Metroidvania. Blasphemous es una gran experiencia para los fans del género.

Plataformas: PC (Reseñado)/PS4/Nintendo Switch/Xbox One
Desarrollador: The Game Kitchen
Publishers: Team17
Lanzamiento: Septiembre 10/2019
Género: Soulsvania Blasfemo.

Mea culpa, mea maxima culpa.

No es muy común toparse con juegos que re-interpretan la mitología religiosa de Occidente. Trastocar la religión pareciera un crimen, especialmente si es propia o cercana de alguna manera. Pero aparece Blasphemous evocando un imaginario específicamente católico, específicamente español, construyendo un juego y una mitología sobre lo que son cimientos sacros para muchos. Propone una blasfemia: una violenta y sangrienta injuria.

Y había que jugarlo para expiar las culpas.

Blasphemous, de la desarrolladora española The Game Kitchen y publicado por Team17, es un metroidvaina o plataformero de acción y exploración 2D. El juego toma lugar en el lúgubre y gótico mundo de Orthodoxia: desolado, devoto y en pleno calvario. Todos en este mundo parecen estar penando por algún pecado. Hasta los propios enemigos con los que luchamos parecen padecer o soportar voluntariamente algún castigo propio de la Divina Comedia. Y ni hablar de los personajes con los que podemos interactuar: todos están buscando el sufrimiento para hacer penitencia, de una u otra forma.

El juego bebe específicamente de la estética del catolicismo gótico, agregando mucho de España, de los ostentos de Semana Santa. Pero transformado en algo monstruoso, exagerado. Es una espectacular coagulación en pixeles de una estética de violento sufrimiento como penitencia, ambientado con música épica mezclada con folclore español.

Además de arte en pixeles, hay un par de cinemáticas espectacularmente animadas en arte de píxeles. Es una lástima que sean tan pocas.

Nosotros jugamos como El Penitente, el último miembro de la Orden de los Hermanos Silenciosos, que ha salido de su tenebroso monasterio en una misión de autoflagelo, expiación de culpas y enfrentamiento con lo divino. Una misión en línea con el designio divino pero que conforma una ofensa contra la propia divinidad.

Una blasfemia.

Exáctamente qué estamos haciendo y qué queremos lograr está para ser interpretado dentro de la mitología del juego. La historia del juego está toda más o menos cifrada en un lenguaje lleno de metáforas de sufrimiento e imaginario católico. Quienes hayan tenido clases de catecismo, encontrarán muchas referencias y préstamos, transformaciones que hacen alusión a un par de realidades cristianas algo incómodas. Pero el juego toma una distancia prudente en su transformación.

No creo que alcance a ser ofensivo. Pero no soy el mejor juez de ello.

Cada cosa que revela el juego parece estar cargada de nuevas preguntas y de cómo ese aspecto encaja en el mundo de Orthodoxia y la historia de nuestro Penitente. A mí me pareció una dicha de explorar, de leer entrelíneas, pero no todos tendrán la misma paciencia.

Por fortuna para quienes no van con desglosar mitología e historias crípticas para descubrir secretos, el juego es mecánicamente sólido.

En términos jugables, Blasphemous tiene pies en Castlevania más que en Metroid y rescata curiosamente un par de elementos de Dark Souls -que parece ser una influencia hostigante hoy en día-. Pero es un metroidvania primero.

El progreso no lineal a través de mapas interconectados está todo aquí, con secretos detrás de paredes falsas, puzles y retos de combate y plataformas. Pero el aspecto más fuerte del juego seguramente es su combate: damos espadazos para acabar con nuestros enemigos, tenemos la habilidad de esquivar y podemos bloquear (parry en español es “parada”) ataques para contraatacar. También podemos rechazar algunos proyectiles, pero no es la norma. Son unas bases sencillas que brillan por las buenas animaciones y algunos enemigos difíciles.

Sin embargo, el juego no tiene tantos puzles y al plataformeo le vendría bien un par de ajustes: hay demasiados saltos justos.

Los jefes (10) son todos aterradoramente fascinantes, desde una cabeza flotante que convoca manos y tiene parte del cerebro descubierto, hasta un bebé sin ojos cargados por un monstruo de espinas. Tienen ese retorcido tenebroso aspecto de algunos jefes de Dark Souls, como entidades echadas a perder. Pero diría que son particularmente difíciles, además de tal vez dos. Hay una forma, al inicio del juego, de conseguir algo de ayuda en las peleas. Pero tiene sus consecuencias.

Si hay jefes secretos, no los encontré.

Curiosamente, algo que no está como en otros metroidvanias es que no necesitamos conseguir habilidades nuevas para tener acceso a otras áreas. Hay habilidades de navegación pero hacen parte de los secretos del juego, como recompensa al final de misiones secundarias con resoluciones poco obvias (hay que leer el lore). Estas nos sirven principalmente para alcanzar las mejoras y coleccionables del juego y conseguir acceso a otras misiones secundarias, pero no para abrirnos camino.

Francamente, estuve mucho tiempo esperando impaciente a que un jefe resultara dándome algunas habilidades (se llaman Reliquias en el juego), pero casi por accidente comprendí que tenía resolver las misiones secundarias para conseguirlos. De otra manera, podemos completar el juego sin ninguna Reliquia adicional.

De Dark Souls hay un par de mecánicas familiares, además de combate difícil. Primero, recuperamos vida con viales de bilis roja (frascos) y los recuperamos al llegar a puntos de salvado o cuando morimos. Conseguimos viales vacíos a lo largo del juego y debemos llevarlos a un lugar/personaje específico para incorporarlo en nuestro equipo.

Dato curioso: la bilis roja es sangre en la teoría de los humores. Exceso de bilis roja tiene que ver con el optimismo. Echarse sangre en la cara para recuperar vida / energía tiene sentido.

La segunda mecánica es que hay una penalidad después de morir. Al morir dejamos en el lugar de nuestra muerte nuestra Culpa que debemos recuperar donde la dejamos. Pero distinto a Dark Souls no perdemos experiencia o dinero (Lágrimas): cada que perdemos culpa el juego bloquea parte de nuestro acceso a la magia (Milagros) y ganamos menos Lágrimas. Hice las pruebas a ver si la barra completa quedaba anulada con suficientes muertes, pero parece que solo un tercio queda bloqueado (como 5-6 muertes).

Tener que ir a recuperar nuestra Culpa funciona la mayoría de las veces. Varias veces cuando moría en una trampa de estacas, mi culpa quedaba sobre la trampa (que causa muerte instantánea) y tuve que resignarme a no recuperarla. Hay, claro, una mecánica para recuperar la culpa pagando con Lágrimas, pero no dejaba de ser un problema.

Por lo demás, el juego tiene bastantes cosas por recolectar. Además de las mejoras para la espada (Mea Culpa), la vida, la magia y los viales de bilis, hay huesos de “santos” (¿44?) y querubines (38). Nota: para conseguir todo es necesario tener al menos cinco reliquias y estas cuentan más o menos como coleccionables raros.

Desafortunadamente, devolverse a áreas anteriores para completar colecciones suele ser tedioso. Sin la necesidad de estar abriéndose camino a cosas nuevas con habilidades, regresamos solo a buscar secretos, no a descubrir más del juego. Esto, me parece, vuelve la exploración una tarea, más que una parte importante del juego. Además el mundo no está tan aparentemente interconectado.

Los enemigos solo son novedad la primera vez que los encontramos, pero pierden un poco de su encanto y mucho de su reto con las mejoras que adquirimos. Especialmente el ataque a distancia.

Blasphemous es un excelente metroidvania 2D. El combate es un gusto y el mundo tiene un atractivo muy peculiar. Si eres fans de los metroidvanias y los Souls-like, este juego es una buena mezcla.

¿Soulsvania?

Yo exploré obsesivamente todo el mapa y vencí el juego con 98.75% completo en algo así como 16 horas. Hay un par de cosas que no pude conseguir porque no hice algunas misiones (supongo) o porque me faltó pegarle a una pared. También me topé con un buen número de bugs, pero muchas ya fueron resueltas en el patch v 1.0.6.

Reseña hecha con una copia de Blasphemous para PC provista por Team17.

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