Blasphemous 2

Blasphemous 2 mejora muchos elementos del título de 2019, aunque algunas decisiones no logran evocar las mismas emociones del título original.

Plataformas: PC(Reseñado)/PS5/Xbox Series S|X
Desarrollador: The Game Kitchen
Publishers: Team17
Lanzamiento: Agosto 24/2023
Género: 2D Dark Souls

En el 2019 no era fácil destacar en el exigente mercado de los metroidvania indie. Pero pese a la saturación y la sombra de juegos que ahora son hitos más allá de su género, Blasphemous destacó por su memorable estética y estilo eminentemente españoles.

Ahora, The Game Kitchen le apuesta a una segunda entrada que agrega profundidad a sus mecánicas y ahonda en el retorcido universo que han gestado. 

¿Será el segundo advenimiento tan bueno como el primero?

Blasphemous 2 toma lugar un siglo después de los eventos del primero. Yo no recordaba muy bien cómo había concluído el anterior, así que busqué un video para que me explicaran. Tampoco me quedó tan claro. Pero en resumidas cuentas, el Penitente (nuestro héroe) cumplió su misión divina de enfrentarse y derrocar al Milagro y los tormentos que esta deidad había traído al mundo de Cvstodia.

Los efectos del Milagro – penitencias irónicas a sus devotos y suplicantes – se disipan del mundo y suponemos que por al menos 100 años hubo relativa tranquilidad. Desafortunadamente, un corazón gigante desciende de los cielos, anunciando el segundo advenimiento y el renacer del Milagro. El Penitente despierta y se embarca una vez más en su barroca y sangrienta aventura para detener lo que sea que esté por ocurrir y vencer al Milagro de una vez por todas. O al menos por segunda vez.

La narración florida, cifrada en lenguaje de versículo de biblia, es un poco más directa que la del primer juego, aunque no por ello más clara. Pero el misterio y la opacidad son intencionales y característicos del subgénero.

Algunos querrán descifrar completamente lo que está pasando, pero que esté abierto a ser interpretado y redescubierto es parte del encanto para mí. Blasphemous 2 expande el lore de Cvstodia, pero no explica mucho. Mi única queja es que un grupo de jefes parecen la versión católica y barroca de los Dark Avengers

Blasphemous 2 no introduce nada nuevo en la ya bien establecida fórmula de metroidvanias (esto no es malo). Es puro y duro plataformeo con hack-n-slash en dos dimensiones a través de una serie de áreas interconectadas que requieren distintas habilidades para avanzar superando retos (mecánicos o de combate) o resolviendo puzzles. Lo único diferente esta vez es que al morir no dejamos atrás experiencia o puntos que debemos recuperar, sino que acumulamos “Culpa” que poco a poco limita el máximo de nuestro “Fervor” (mana). 

También tenemos más diversidad en el combate, con tres armas a elegir, nuevos rezos y cuatro tipos de daño. La selección de las armas, junto con su sistema de mejoras, es el cambio más integral que trae esta secuela porque también afecta a qué áreas tenemos acceso al inicio del juego. “Ruego al alba” es una espada, “Veredicto” un mangual y “Sarmiento y Centella” una pareja de sables.

Las tres aplican un tipo de daño secundario diferente, pero para el combate lo más significativo es su velocidad de ataque: medio, lento y rápido, respectivamente. Yo soy una persona de “ni muy muy, ni tan tan”, entonces para la mayor parte del juego utilicé a “Ruego al alba” y también fue la primera arma que mejoré al máximo.

Desafortunadamente, no me parece que los enemigos sean tan variados y casi todo se puede resolver a golpes, sin mucha estrategia. 

Los Rezos no son nada que no hayamos visto antes y hay algunos que vienen del juego anterior con un par de ajustes. Mi selección fue más temática o estética (¿a quién no le gusta electrocutar enemigos?), que práctica. Los rezos ciertamente son la manera más directa de aplicar los distintos tipos de daño (relámpago, miasma, fuego, místico), pero en muy pocas ocasiones fue claro para mí cuáles enemigos eran débiles a cuáles efectos. Tal vez soy muy básico en mi manera de resolver los retos de combate, pero no hubo nada en el juego que buen timing y algo de paciencia no resolviera.

Descubrir un efecto de daño efectivo contra una criatura era más un momento de grata sorpresa (pero una coincidencia, porque intenté electrocutar todo).

Para otras modificaciones a nuestro combate, tenemos nuestro “Rosario” y un “Retablo de Favores”. El Rosario funciona muy similar al del juego anterior, encontramos “Nudos” para desbloquear más espacio y las “Cuentas” son la bonificaciones como tal.

En el Rosario están los bonos de resistencia a tipos de daño o un aumento a la cantidad de lágrimas que ganamos, entre otros. Al Retablo no le tengo análogo del juego anterior, pero en él nos equipamos Figuras de madera que nos dan distintas bonificaciones de combate y se pueden combinar para darnos bonificaciones más fuertes.

Encontrar y desbloquear las Figuras está atado a varios quests secundarios.

Como en otros juegos de este género, mucho del espectáculo mecánico y temático viene de los jefes. Blasphemous me sorprendió en el 2019 con una serie de humanos monstruosos y grotescos, salidos de un mosaico de imaginario católico fascinante. En su momento, todos me invitaron a revisitar una plétora de arte y simbología religiosos para dar con las partes que componían esas quimeras. Desafortunadamente, Blasphemous 2 no despertó lo mismo en mí. 

No digo que este elenco de enemigos no beba de la misma manera de esta transformación del catolicismo español o sevillano, pero la gran mayoría son “personas con poderes”. Me parecieron más un rogues’ gallery que una serie de manifestaciones horrendas de una voluntad divina corrupta. No pensé que me topara con la crítica que hace años le hicieron a Dark Souls 2: “demasiados jefes humanoides, muy pocas monstruosidades”. 

De todas maneras son retadores y mucho del espectáculo viene de las animaciones y efectos que componen sus ataques, y en esto Blasphemous 2 no decepciona. 

Sin duda, el juego tiene sus horas más efectivas en la primera mitad. Pensé que la selección del arma al principio (elegí “Ruego al alba”) era importante como preferencia de combate, pero me sorprendió (y me pareció inteligente) que todas estuvieran atadas a las mecánicas de navegación y desbloqueo de áreas nuevas. Esto vuelve el inicio del juego bastante no-lineal y enriquece muchísimo la sensación de exploración y descubrimiento. Pero eventualmente, la historia tiene que avanzar en una sola dirección y se vuelve más lineal.

El juego, por su género, igual continúa invitando a explorar y descubrir secretos en áreas anteriores, pero creo que me impulsó más querer completar todas mis colecciones que honestamente explorar con curiosidad. Sí le dediqué algo de tiempo a desentrañar los misterios más esotéricos del juego, pero no pude dar con algunos.

Estoy seguro que periodistas más ávidos que yo (y con mejor dedicación) si dieron con descifrar más secretos de Cvstodia, pero me contento con haber al menos seguido varias de las pistas de unas cartas que terminan por recompensarlos con un Rezo. Todavía estoy pendiente de entender qué hacer con un par de objetos clave y descubrir cómo desbloquear el otro final, pero a esta altura ya puedo apoyarme de otros jugadores más sagaces. 

Si no quieren usar guías (y si son bilingües), me sirvió en ocasiones que la traducción a inglés de los textos daba pistas de otras maneras.

Igualmente, jugar Blasphemous 2 me invitó mucho a pensar sobre los hilos culturales y religiosos que atan a Latinoamérica con España. Las imágenes, los símbolos y los conceptos del catolicismo que The Game Kitchen ha transformado en el mundo de Custodia me son familiares y creo que ahonda en el impacto que un juego así tiene en mí. No voy a reparar en detalles ni análisis, pero creo que hay una riqueza de discusiones a tener sobre las particularidades del lore de Blasphemous desde las Américas.

Blasphemous 2 es una secuela sólida. The Game Kitchen trabajó sobre lo que funcionó del primero e hizo ajustes y mejoras significativas. El mayor logro del estudio, a mi parecer, sigue siendo el desarrollo de su peculiar mundo, pero no por ello es menos relevante que con este ya han entregado dos excelentes juegos en un género difícil de desarrollar.

Muy recomendado para todos a quienes les gusten los metroidvania y más aún para quienes ya jugaron el primero.

Reseña hecha con una copia de Blasphemous 2 para PC provista por Team17.

A %d blogueros les gusta esto: