
Demon Slayer: The Hinokami Chronicles 2
The Hinokami Chronicles 2 es una mejora del original y una buena forma de ponerse al día previo a la nueva película de Demon Slayer.
Plataformas: PlayStation 5 (Reseñado)/PC/PS4/Nintendo Switch/Xbox One/Xbox Series S|X
Desarrollador: CyberConnect2
Publishers: SEGA
Lanzamiento: Agosto 5/2025
Género: Pilares y Demonios
Han pasado 4 años desde el lanzamiento oficial de Demon Slayer: The Hinokami Chronicles, un juego que si bien no fue perfecto, destacó por su calidad en la mayoría de sus apartados gracias al trabajo de CyberConnect 2, estudio que al día de hoy es reconocido como uno de los más importantes para Bandai al estar tras la saga Ultimate Ninja Storm además de Azura’s Wrath.
Después de una espera no tan larga por fin llega su secuela, adaptando más de la historia de Tanjiro que tanto impacto ha tenido a nivel mundial y que llega justo en un gran momento al debutar junto a la película Castillo Infinito… al menos en Japón.
De este lado del mundo tenemos que esperar un poco más para ver este largometraje.
Así pues, The Hinokami Chronicles 2 abarca los arcos del ‘Distrito Rojo’, ‘La Aldea de los Herreros’ y concluye con ‘El Entrenamiento de los Pilares’, donde fielmente adapta los eventos vistos en el anime para que sean visualmente igual de impactantes, aunque acelerando el ritmo para que la experiencia sea menos extensa que la propia serie.
Dicho esto, cada arco está compuesto por varios capítulos donde, como siempre, encontramos enfrentamientos contra oponentes, recuerdos (a modo de extras que complementan la historia) y, por supuesto, fases de exploración donde tenemos un entorno no tan grande que podemos recorrer en busca de misiones secundarias y coleccionables.
Sobre esto último no hay muchas novedades salvo el hecho que ahora, dependiendo del momento, podemos tomar control de Zenitsu o Inosuke, donde también podemos usar sus habilidades personales para resolver pequeños puzzles.
Estas partes por fortuna no son tan largas, y es que incluso si se tiene el control de Tanjiro, los encargos son cosas elementales que no aportan a la experiencia y están más cerca de ser fetch-quest tipo “busca una carta” o “busca una persona”.
Dentro de estas misiones también hay algunos enfrentamientos contra humanos y demonios, pero al ser un “relleno”, la verdad es que tampoco tienen un alto impacto salvo los objetos que pueda dar como recompensa.
Ahora bien, dentro de la campaña y los modos de juego offline también tenemos la posibilidad de equipar a nuestros personajes con objetos que mejoren su rendimiento, por lo que si bien el modo historia no es complejo en términos de dificultad, podemos aligerar la carga al poner artículos que aumenten nuestra vida, defensa, ofensa o tengan algún efecto especial como activar recuperación de energía, etc.
En sí, la campaña es corta y tiene una duración de más o menos 6-7 horas (por mucho) y al igual que el anime, tienes sus altos y sus bajos. Si hablamos de intensidad de combates y tensión emocional, los primeros dos arcos son impecables… lo cual desafortunadamente nos lleva al entrenamiento con los pilares y es que al adaptar el anime y, técnicamente, el anime se tomó sus libertades para hacer una temporada entera de algo que sucedía en un par de páginas, aquí no se puede esperar mucho.





Aquí básicamente pasamos de mini-juego en mini-juego a combates de entrenamiento que, si bien no toman mucho tiempo, se vuelven aburridos.
Lo peor de todo esto, es que todo fan de Kimetsu sabe como acaba este arco, sabemos lo que pasa en la hacienda de Ubuyashiki y tenemos como referencia esa excelente entrada de Muzan y su breve encuentro con los pilares en el anime, solo para que aquí la pelea final del juego sea un enfrentamiento amistoso con Tomioka.
Se siente como una oportunidad perdida de haber permitido al jugador ser participe de esta increíble secuencia en la que los pilares, por mas que lo intenten, fracasan en su misión, llevando al cliffhanger que abre las puertas del arco final del Castillo Infinito.
Fuera de la campaña principal existen varios modos de juego, entre ellos un “resumen” del primer Hinokami Chronicles en el que podemos repetir las peleas más importantes de este título.
Si bien no tienen la misma intensidad que las originales al prescindir de los QTE, esto lo hace un complemento ideal para aquellos que pasaron de la primera entrega pero piensan obtener esta, además que permite jugarlas en dos dificultades, normal y difícil.
Pero quizá el modo de juego offline más importante es el entrenamiento con los pilares, donde seleccionamos con quien queremos entrenar entre los 9 ‘hashiras’. Aquí pasamos a un tablero lleno de casillas como si fuera un juego de mesa. La idea es saltar de casilla en casilla y completar dichos combates hasta llegar al enfrentamiento final con el pilar seleccionado.
Este modo de juego cuenta con 3 dificultades y, naturalmente, entre más alto más complejo se hace, por lo que se recomienda buscar rutas donde también haya casillas de recuperación, aunque algo que toca tener en mente es que también hay casillas que desbloquean coleccionables, por lo que todo se resume en habilidad y un poco de suerte.
Ciertamente se ve un salto grande entre la primera y la segunda entrega, aquí de entrada se siente que hay más contenido que en el primer juego, especialmente si hablamos en términos del repertorio de personajes.





Aquí tenemos a disposición 40 luchadores, evidentemente algunos son repetidos, como las distitnas fases de Tanjiro, pero se compensa al tener todos los pilares y algunas de las lunas, especialmente Akaza, que originalmente fue un DLC para el Hinokami Chronicles.
Obviamente, un juego de este calibre no puede prescindir de tener DLCs y aquí viene la buena y … ¿mala noticia? Porque a futuro se sabe que Muzan llegará como complemento gratuito, pero también se ha anunciado que habrá un pack de Castillo Infinito cuyo contenido se desconoce, pero se sabe que es de pago.
Demon Slayer: The Hinokami Chronicles 2 es claramente una secuela superior en la mayoría de sus elementos, tanto a nivel de mecánicas, que no cambian para nada, como en términos de contenido y la forma en que adapta la historia.
No es un juego perfecto, pero ciertamente hace parte de esa selección de juegos que, si se es fan del manga/anime, vale la pena probar… en lugar de dar pena como sucedió con el de Jujutsu Kaisen.
Quizá lo más preocupante del todo esto es el futuro, porque si bien hay un DLC de Castillo Infinito en camino, a estas alturas no hay mucho que falte por adaptar… por lo que sienta la pregunta de si vale la pena una tercera entrega o no.
Reseña hecha con una copia de Demon Slayer: The Hinokami Chronicles 2 para PlayStation 5 provista por SEGA.