
Ender Magnolia: Bloom in the Mist
Ender Magnolia toma lo que hizo al anterior título tan interesante y lo eleva mejorando varios elementos en su Early Access y versión 1.0.
Plataformas: PlayStation 5 (Reseñado)/PC/PS4/Nintendo Switch/Xbox One/Xbox Series S|X
Desarrollador: Adglobe/Live Wire
Publishers: Binary Haze Interactive
Lanzamiento: Enero 22/2025
Género: Metroidvanias Modernos
Hace 4 años mencioné en mi reseña de Ender Lillies que hay juegos que se quedan con uno desde el principio sea por su apartado artístico, musicalización, historias o personajes.
Quizá ya esté parcializado porque este universo me gusta bastante, pero aquí siento lo mismo… en especial porque Ender Magnolia: Bloom in the Mist es un gran paso adelante en esta pequeña IP que ha sabido perfeccionar su fórmula.
Ambientado en el mismo mundo, Ender Magnolia sucede décadas después del primer juego. Ahora estamos en la ‘Tierra de los Humos’, un reino avanzado donde los humanos tratan de sobrevivir a una sociedad que no solo es dispar por las segregación de clases en distritos, sino a los ‘homúnculos’, humanos artificiales creados con el único fin de servir, pero que se han corrompido por una niebla tóxica que poco a poco los convierte en seres hostiles muy peligrosos.
Aquí entra Lilac, la nueva protagonista, que despierta repentinamente de un sueño sin ninguno de sus recuerdos, pero con una misión clara: salvar su reino. ¿Cómo lo hará? Bajo un sistema similar al visto en Ender Lillies.
Lilac es una ‘Attuner’ o ‘Afinadora’, lo que quiere decir que ella tiene la capacidad de purificar a los homúnculos corrompidos mientras su núcleo no haya sido destruido. El primero es ‘Nola’, una caballero del reino que también despierta sin ningún recuerdo, estrechando así su lazo de maestra-sirviente al tener un fin común.
Evidentemente, Nola no es la única ayuda que Lilac tendrá y es que a lo largo del juego tendremos que purificar (o ‘Afinar’) distintos homúnculos para que nos presten su ayuda, los cuales cubren cada uno de los distintos aspectos del combate (cuerpo a cuerpo, a distancia o automatizados) y la exploración (fast-travel y habilidades clave para acceder a zonas bloqueadas).
Sin embargo, la relación de Lilac con los homúnculos va mas allá que la un maestro-herramienta, y es que cada uno de ellos tiene una historia sobre lo que han tenido que vivir durante el tiempo en que han estado dormidos, corrompidos o perdidos sin propósito y en ella encuentran una razón para seguir sin importar lo que hayan perdido en el camino.
Definitivamente este es un mundo cruel, con una ambientación fantástica pero a la vez deprimente en la que vemos otro ejemplo de como la codicia humana es lo que eventualmente lleva a su ruina, corrompiendo todo lo que una vez fue ‘puro’ en pro de fines donde no existe la moral y donde, irónicamente, ni siquiera los humanos son el ‘villano’, sino algo que hereda su voluntad.
Para ejemplos prácticos, Ultron.





Y aún así, no todo está perdido. Lilac es una brasa que crece y crece gracias a los lazos que establece, a la forma en que se involucra con ese mundo perdido con el único fin de lograr lo imposible: hacerlo sanar.
En sí, la duración de la campaña es similar a la de Ender Lillies, por lo que unas 15-16 horas serán suficientes para ver el ‘Final A’, para el ‘Final B’ hay que invertir un poco más de tiempo (se debe completar todo el questline de Ruby) y si se busca el Platino (del que me faltan apenas 3 trofeos) 35-36 horas está perfecto.
Ahora bien… más allá de la conmovedora historia ¿qué trae de nuevo este juego?
Lo más notorio es TODO el sistema de combate. Le decimos adiós al incómodo sistema de 3 slots de Ender Lillies que teníamos que hacer rotar con R1 para acceder a otros comandos, para darle la bienvenida a unos de 4 slots: ataque básico (cuerpo a cuerpo), ataque secundario (con recarga de tiempo), ataque de ráfaga (a distancia) y automatizado (que puede ser a distancia o cuerpo a cuerpo).
A su vez, cada homúnculos no cuenta con un solo estilo de combate, sino con 3. Por ejemplo, Nola puede atacar con una espada, una guadaña o un mazo, haciendo que sus atributos de daño y velocidad cambien.
Esto permite un grado de personalización donde vale la pena tomarse el tiempo para explorar cada opción y sus posibles combinaciones con cada personaje que purifiquemos hasta dar con un set que se ajuste a nuestra forma de juego.
En mi caso, prioricé velocidad sobre daño, jugando con Nola y su guadaña, mientras hacia daño a distancia con Munnin (Buho automatizado) y Yolvan, a la vez que controlaba también mi distancia con Lito o No. 7. Pero estoy seguro que habrá personas que prefieran estilos de combates más activos y menos “seguros”.
De forma similar a Ender Lillies, aquí también debemos encontrar ciertos recursos necesarios para mejorar dichas habilidades, lo cual es necesario para enfrentar a los enemigos que cada vez son más resistentes y, en algunos casos, irritantes.
Aunque a diferencia del Ender Lilies, siento que Ender Magnolia no tiene una curva de dificultad tan alta… al menos en modo normal.





Por fortuna, esto se puede ajustar desde el menú y, como otros juegos del género, al incrementar la dificultad, también incrementan las recompensas.
Sumado a lo anterior, también podemos mejorar las capacidades de Lilac al equipar distintas piezas de armadura (brazaletes, corazas, etc) y reliquias, que afectan positivamente sus estadísticas en términos de puntos de salud, viales de recuperación, velocidad, etc. En sí, hay bastantes herramientas a nuestra disposición con las que difícilmente nos sentiremos en desventaja.
En cuanto a la exploración, Ender Magnolia es un metroidvania de formula en sentido que es natural y obvio el tener que hacer backtracking para explorar todo el mapa al 100%.
Aquí es menos tedioso que en Ender Lillies, no solo por la generosa cantidad de puntos de fast-travel, sino porque hay diversas habilidades que mejoran la forma en que nos podemos desplazar por los escenarios.
Además, el mini-mapa (y el mapa en general) es mucho más detallado y nos permite intuir de forma simple donde puede haber una habitación oculta.
Ender Magnolia: Bloom in the Mist es una excedente secuela en cada elemento. Desde su cuidada ambientación, gran musicalización y optimo rendimiento, a la forma en que cada mecánica fue cuidadosamente refinada para brindar una experiencia más fluida.
Su historia es conmovedora, con ciertos cliché tipo anime, pero igual una gran experiencia. Definitivamente, una IP que da gusto ver y de la que espero ver más en el futuro.
Reseña hecha con una copia de Ender Magnolia: Bloom in the Mist para PlayStation 5 provista por Binary Haze Interactive.