The Medium
Aunque The Medium toma inspiración de títulos clásicos y visalmente es muy estilizado, mecánicamente se queda con ideas a medias.
Plataformas: PS5 (Reseñado)/PC/Xbox Series S|X
Desarrollador: Bloober Team
Publishers: Bloober Team
Lanzamiento: Septiembre 3/2021
Género: Silent Hill que no es Silent Hill
Bloober Team es un estudio que al día de hoy ya es reconocido por sus múltiples incursiones en el género del terror en la industria de los videojuegos. Particularmente desde Layers of Fear, que fue publicado en el año 2016. Con el tiempo han refinado su fórmula y aunque en general sus títulos tienen elementos positivos, siempre ha habido algo que los retiene y los deja en ese limbo donde están los juegos ‘regulares’.
The Medium es su más reciente IP, publicada en principio para la PC y Xbox Series X|S, que intenta ser el inicio de una nueva franquicia con elementos de terror inspirados en grandes clásicos como Silent Hill y Resident Evil, pero que se queda corta no tanto en el frente narrativo, sino a todo lo que gira en torno a su gameplay.
Aquí tomamos el control de Marianne, una medium espiritual que tiene el particular poder de comunicarse con el ‘más allá’, siendo así un puente entre el mundo de los vivos y los muertos. Muy en la línea de lo que fue Silent Hill en su momento, su “aventura” se pone en movimiento cuando un día recibe una misteriosa llamada que la lleva a visitar el misterioso ‘Niwa Worker’s Resort’, un complejo vacacional escondido en tierras polacas que se hizo su renombre no por sus instalaciones, sino por una horrible masacre que allí sucedió.
Está claro que hay una fuerte conexión entre el hotel, el hombre detrás de la misteriosa llamada y Marianne. De hecho, el encanto de The Medium radica en descubrir qué es lo que los une, mientras poco a poco vamos conociendo los oscuros secretos del ‘Niwa’, donde se explica el por qué tiene una fuerte actividad paranormal y donde aprendemos que allí hay algo más.
La tensión crece a cada momento y es realmente un juego muy interesante por lo que propone. Como tal, la idea de los médium es hasta un cliché en las historias de terror, pero en The Medium se hace interesante por la forma en qué Marianne puede “habitar” los dos mundos y los giros de trama que poco a poco revelan la naturaleza de su poder.
Desafortunadamente, The Medium no es tan interesante en su frente de jugabilidad y si bien tiene las intenciones, al final se siente que cumple a medias.
En términos de ambientación y exploración se nota que The Medium tomó inspiración de los grandes. Los ángulos de cámara, el desplazamiento de Marianne y que no haya una interfaz ayudan a sumergirse dentro del juego. Los bosques se sienten agobiantes y la tensión que hay al explorar el resot Niwa recuerda bastante a Silent Hill por lo estrecho y desconocido que se siente. El problema radica en la poco práctica mecánica de explorar los dos mundos al mismo tiempo.
Se supone que uno de los grandes atractivos del juego son las fases en que podemos controlar a Mariane en los dos planos, los cuales son segmentos cortos en los que debemos realizar algo en el mundo de los muertos para avanzar en el mundo real. Al principio estas fases están libres de obstáculos, pero con el tiempo se hacen más “complejas” en la medida que tenemos que evitar algunas amenazas para poder progresar.
La cuestión es la siguiente. Que la pantalla se divida en dos se siente más como un capricho porque no tiene una razón de ser. Si tenemos que desplazarnos por el plano de los muertos para encontrar una fuente de energía espiritual que al llevarla al plano real sirve para activar un ascensor, entonces bien podrían presentarme un solo plano y no a los dos a la vez.
Son muy pocos los puzzles que aprovechan la mecánica de habitar los dos planos al tiempo y se siente extraño que este sea el resultado final cuando dentro del mismo juego hay un par de fases de completa exploración en el mundo espiritual, donde se aprovecha mucho más la ambientación y da una mejor idea de lo que allí habita.
Y es que el gran problema con está mecánica es esa, que al dividir la pantalla, corta la información a la mitad tanto en el mundo de los vivos, como en el de los muertos. Se desaprovechan los escenarios, en especial los del otro plano y dificulta en ciertas fases el desplazamiento por los mismos. Tampoco ayuda que hay segmentos donde la pantalla se agranda a dos tercios del área de juego para dar un “mejor vistazo” de la acción, pero es que si me están persiguiendo tampoco voy a apreciar nada de lo que tengo en frente.
Pero lo más extraño de esta mecánica es que persiste dentro de las cinemáticas, a veces con sentido, pero la mayormente porque sí, por lo que es recurrente ver la pantalla dividida a la mitad: una donde vemos a Marianne hablar e interactuar con un espectro sobre lo peligroso que es recorrer el mundo espiritual huyendo de un terrible espectro nacido por el odio… y otro donde Marianne está sola en el mundo real haciendo los mismo movimiento pero sola.
De nuevo, la intención está ahí, y ciertamente tiene lógica que en el mundo real ella esté sola porque es su ‘yo’ espiritual el que habita el mundo de los muertos, pero si lo interesante está en el más allá, entonces el enfoque debería ser ese. Nada aporta ver a Marianne interactuar con el aire cuando en el otro plano está sucediendo todo lo que hace avanzar la trama.
Fuera de todo lo anterior, la versión de PlayStation 5 aprovecha ligeramente la tecnología del DualSense y en cierta medida si refuerza la experiencia… pero no mucho. Los parlantes integrados emiten el sonido de cosas puntuales, por lo que no siempre están “activos” y son contadas las secuencias en las que se aprovechan con la vibración háptica.
Por su parte, los gatillos adaptativos se aprovechan más que todo en el plano espiritual, ya que ambos están ligados al sprint y la habilidad principal de Marianne para defenderse, que es básicamente un halo de fuerza que repele enemigos.
Presionar el botón R2 entonces ejerce una resistencia en el gatillo que indica la potencia del poder, mientras este vibra y suena. Es un ‘plus’ que se agradece en la experiencia, pero tampoco la lleva a un nivel superior. Por fortuna, tampoco la arruina.
Si hablamos de desempeño, a estas alturas ya es difícil encontrar un juego que corra mal y esta no es la excepción. Es un título supremamente estable y lo máximo que se le puede exigir en términos visuales es que para el momento en que salió se siente algo quedado… sin embargo, teniendo en cuenta la proveniencia del estudio y la experiencia en general, no está mal.
Lo único que si se siente desaprovechado en PlayStation 5, y es un ‘nitpicking’ algo quisquilloso, es que la mayoría de juegos cargan al instante por el SSD y este no. Se demora un par de segundos en cargar, sea cuando iniciamos el juego o cuando carga un punto de control tras una muerte.
The Medium es un juego ‘muy Blobber Team’. Tiene unas excelentes ideas, las mejores de las intenciones y dentro de todo resulta bastante interesante, pero se queda corto en ciertos apartados. En este caso la jugabilidad es lo que arrastra la experiencia y no le hace justicia a lo que argumentalmente propone, sin embargo, quizá todo este sea tomado en consideración para su futura secuela, ya que si algo deja claro el final de la campaña, es que hay bastante ‘tela por cortar’.
Reseña hecha con una copia de The Medium para PlayStation 5 provista por Bloober Team.










