Boomerang X

Boomerang X trae cosas muy interesantes en su jugabilidad, pero cae en los mismos errores que muchos FPS en la actualidad.

Plataformas: Switch (Reseñado)/PC
Desarrollador: DANG!
Publishers: Devolver Digital
Lanzamiento: Julio 8/2021
Género: ¿Secuela de Cocodrilo Dundee?

Es común que los juegos de disparos en primera persona sean repetitivos en cierta forma por su naturaleza. Sean juegos militares, ambientados en un mundo de ciencia ficción o basados en propiedades existentes, las armas de fuego son armas de fuego y salvo que haya una intención detrás en sus mecánicas, es muy raro ver que la fórmula cambie.

Boomerang X parte de esa idea y establece un set de nuevas reglas bastantes interesantes para un FPS, siendo un juego con cierto carisma y dinamismo que aunque es osado en lo que propone, no se salva de tener sus puntos flacos.

Dicho esto, este es uno de esos títulos que no tienen un enfoque narrativo, ya que aquí solo importa ponernos en contexto: somos un sobreviviente a un naufragio que llegó a una isla desconocida de donde debemos salir y para lo cual usaremos un conveniente bumerán con forma de ‘X’ que es nuestra única herramienta de exploración y combate.

A lo largo de varios niveles encontraremos unos pintorescos personajes que revelarán un poco más sobre la misteriosa isla a la que llegamos, pero claramente el enfoque aquí no es contarnos una historia ‘de inicio a fin’, sino hacernos participes de una experiencia que se centra en la acción, el constante movimiento y la supervivencia, aunque no en términos estrictos como en WindBound, por lo que no hay elementos de administración de recursos o factores de cuidados como el hambre y el cansancio.

En principio, el bumerán es como cualquier otro en la medida que solo tiene dos modos de disparo: normal y cargado, sin embargo, a medida que van progresando los niveles vamos desbloqueando habilidades que convierten este articulo en una herramienta bastante versátil y vital para toda la experiencia de juego.

De esta forma accederemos a habilidades extremadamente útiles como teletransportarnos a donde arrojemos el bumerán, siendo así un ancla semejante a lo visto en Ratchet & Clank: Rift Apart, que sirve para superar ciertas fases de exploración, pero cuya utilidad se explota más que todo en el combate, ya que permite movernos por el entorno e incluso jamás tocar el suelo.

Sumado a ello podremos congelar el tiempo para poder apuntar mejor y diversos tipos de disparo que poco a poco serán necesarios para enfrentarnos a la gran cantidad de enemigos que debemos derrotar. Desafortunadamente, aquí es donde empieza a flaquear el formato del juego.

En sí, tendremos un total de 12 niveles que están segmentados de forma semejante en la medida que después de una fase de exploración obtendremos una mejora de combate que debemos usar para superar un modo horda que desbloquea la puerta al siguiente nivel.

Si bien el sistema de combate es versátil y siempre está abierto a la experimentación dada la amplia gama de habilidades que tenemos, el objetivo en sí es repetitivo y pierde gracia con rapidez. Tampoco ayuda que los enemigos pierden variedad y se derrotan de la misma forma: apuntando al punto rojo.

Incluso si son unidades “fortificadas” o especiales, eventualmente el truco es el mismo, lo que lleva a que el “ancla” en términos de gameplay sea la dificultad.

Boomerang X no es un juego particularmente dificil, pero si tiene una curva de aprendizaje medianamente elevada por la cantidad de cosas que hay que hacer el tiempo, especialmente teniendo en cuenta que aquí no tenemos una barra de salud sino “escudos” que representan nuestra vida. Si recibimos cierto número de golpes, ya estaremos muertos.

Esta presión hace que tengamos que prestar mucha atención al entorno ya que fácilmente podemos quedar descubiertos, y sean unidades pequeñas o grandes, un solo golpe hace la direfencia. El problema, es que desafortunadamente en los niveles más avanzados pareciera que la dificultad se decanta más por la cantidad que por la “calidad”, por lo que veremos hordas y hordas de minions que están como carne de cañón para ocultar las unidades que sí debemos derrotar.

De una forma un tanto perturbadora, esto hace que no solo haya fatiga mental sino física, dado que hay ciertos comandos, como el relentizar el tiempo par apuntar, que van cansando los dedos a tal punto que es bastante molesto.

Fuera de lo anterior, Boomerang X tiene un apartado visual que está entre lo exótico (o “clásico”) y lo “burdo” (por sus apariencia tosca y poco definida). En general no se ve mal… si se juega en modo portátil en Nintendo Switch, ya que desafortunadamente en modo dock no es un juego que sea visualmente atractivo pese a que el rendimiento es impecable.

Boomerang X es un título difícil de recomendar porque si bien tiene unas excelentes ideas, no todas logran “cuajar” del todo. Sin dudas, destaca de forma positiva lo que hace en términos de gameplay porque es un juego que genuinamente que invita a experimentar con sus mecánicas y posee un sistema de combate ágil y desafiante, pero eso no le quita lo repetitivo que es.

Si alguien está abierto a una experiencia diferente con una duración más que decente, esta una opción a contemplar porque pese a sus múltiples falencias, es un juego que ‘está bien’ y cuyo principio debería ser explorado más a fondo en el futuro.

Reseña hecha con una copia de Boomerang X para Nintendo Switch provista por Devolver Digital.